Los Dantos/Gerald Hernández
¿Llegó el momento de incluir a Omar Mendoza en la conversación del mejor bateador de la actualidad en el beisbol nacional? La evolución de este artillero ha sido tan veloz, que quizá algunos preferirían ver un poco más de él, pero los números son contundentes: Omar tiene el segundo mejor promedio de bateo de la historia moderna de nuestro beisbol, en los primeros turnos al bate de su carrera, con un lujoso porcentaje de .359, debido a 360 imparables en 1,003 visitas al plato, tras la última serie ante el San Fernando.
Así que Omar, jardinero izquierdo de 24 años de edad, registra un mejor arranque de carrera que auténticas maquinarias de bateo de nuestro beisbol como Nemesio Porras, Henry Roa, Jimmy González y Ofilio Castro, por mencionar a cuatro de los bateadores más finos que han existido. De hecho, supera a todos, excepto a Dwight Britton.
Britton es el número uno de la lista con promedio de .367 al cruzar la barrera de los mil turnos al bate. Lo hizo en 2014, con 25 años de edad y luego de su estadía en ligas menores con los Marineros de Seattle. Ya era un bateador con una reputación.
Diferente es el caso de Mendoza, un bateador construido a nivel casero y que hasta hace un par de años era alguien desconocido, pero desde que se ganó un puesto de titular con los Dantos en 2019, ha sido una máquina arrolladora con promedios de .363 en 2019, .421 en 2020, .349 en 2021 y este año anda en .386.
El tercero en el ranking es Aníbal Vega con promedio de .355 al pasar la marca de los mil turnos al bate en 1995, con 25 años de edad. Vega creció en los Estados Unidos y en 1991 regresó al país para jugar con el Bóer y se estableció aquí.
Ofilio Castro es cuarto con promedio de .346 en sus primeros mil viajes al pentágono, pero es un caso similar al de Britton, porque ya tenía una enorme experiencia en ligas menores, incluso coqueteó con las Grandes Ligas, y también como un baluarte de la Selección. Jugó tanto tiempo a nivel internacional, que en el beisbol nacional llegó a los mil turnos a los 30 años de edad.
Si buscamos bateadores con rendimiento similar al de Omar, Jilton Calderón es un buen ejemplo, con promedio de .340 luego de mil turnos, con 23 años de edad en 2011.
Nemesio Porras, considerado uno de los mejores bateadores de nuestra historia, registró promedio de .328 en sus primeros mil turnos, con tan solo 21 años de edad. Al igual que Omar, alguien hecho a nivel local, pero con la ventaja que su ascenso fue más joven.
Si comparamos a Omar con Nemesio en sus primeros mil turnos, quizá para sorpresa de muchos el artillero de los Dantos está arriba en las categorías más importantes del bateo: promedio (.359 a .328), dobles (64 a 53), jonrones (47 a 32), anotadas (219 a 176) y empujadas (182 a 164).
Todos sabemos hasta donde llegó Nemesio, un ícono del beisbol nacional, pero es llamativo como Omar le compite y supera en cifras en la comparación de los primeros mil turnos de ambos. Por supuesto nadie sabe hasta donde llegará Omar, pero de lo que no hay duda es que tiene todos los ingredientes para dejar su nombre como referencia para las futuras generaciones.
